“Prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús”. Filipenses 3:14Los errores que nos cuesta olvidar pueden ser aquellos que se cometieron hacia nuestra persona, o que cometimos hacia otros. Y muchas veces puede ocurrir que el verdadero problema es que todavía no nos perdonamos a nosotros mismos.
El perdón es muy poderoso. La Palabra dice que Dios, al perdonarnos, se olvida de nuestras transgresiones.Cuando nos arrepentimos y pedimos perdón ante Él, se olvida de todo lo malo que hicimos.
El perdón de Dios olvida.
La Biblia muestra que la iglesia de Corinto estaba compuesta de gente de todo tipo. Por ejemplo, personas que habían practicado la homosexualidad. Allí habían llegado hombres y mujeres con toda clase de vicios y malos hábitos. De ellos el apóstol dice: “Estos eran vosotros, pero ahora ya habéis sido lavados, justificados, transformados por el poder de Dios”.
No importa cuales hayan sido los errores que no puedes perdonar, recuerda siempre que Cristo ha llevado todos tus errores en la cruz del calvario y te hizo completamente libre!!!
No pierdas más tiempo, deja en manos del Señor tus errores y también lo que otros te han hecho. Libérate de ese enorme peso en tu corazón! Dios te quiere llevar a la meta!!
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