LA HIGUERA

La higuera

El que permanece en Cristo, da buenos frutos

Juan 15-5

Hace muchos años (25) en el fondo de mi casa se planto una higuera, a pesar de ser pequeña, dio buenos frutos.

Pero al poco tiempo a su lado crecio un arbol muy grande, este arbol da buena sombra en verano, pero la higuera quedo rlegada a la oscuridad de la sombra del arbol y no solo que dejo de crecer sino que tampoco dio mas frutos, durante años, solo fue un palito marron que sacaba solo algunas hojas, pero nunca mas un fruto.

Hace tres años decidi, hacer algo por la pobre higuera, la solucion estaba en cambiarla de lugar, lejos del arbol, a un lugar con aire y sol.

Claro que corria el riezgo de que se seque definitivamente. Transplante la higuera en un lugar espacioso donde pudiera desarrollarse y extender sus raices.

Al poco tiempo parecia que el intento por salvarla habia fracazado, ya que solo quedo un triste palo (aparentemente sin vida).

Mi sorpresa fue cuando comenzo a reverdecer, primero un brote, luego otro y otro mas. Ese año crecio tres veces mas de lo que lo habia hecho en veinte años, pero no dio frutos.

Al año siguiente ya media casi dos metros (saco muchas hojas pero todavia, ningun fruto).

Al tercer año ya media mas de tres metro y por fin dio sus primero frutos.

Esta entrando al cuarto año y la higuera que no tenia posibilidades, esta dando muchos frutos.

Esto me dejo una enseñanza, muchas veces estamos como la pobre higuera, aparentemente sin vida, y secos.

Nadie da mucho por nosotros, peor hay alguien que nos ve de otra manera.

Dios nos ve llenos de frutos y vida, para El somos de gran valor aunque los demas nos vean sin posibilidades.

Aveces las circunstancias nos tapan como el gran arbol a la higuera, pero siempre esta Dios, para llevarnos a buena tierra y cuidar de nosotros.

no importa como estes hoy, ni como los demas te vean. si tenes a Cristo en tu corazon, El e la buena tierra que tu vida necesita.

Autor Daniel Escobar