¿CONDENACION O JUICIO?

¿Condenación o juicio?


«Hermanos, no os quejéis unos contra otros para que no seáis condenados» (Sant. 5:9).

Pregunta: ¿Cómo se entiende esto? ¿Puede una queja ser causa de condenación?
Respuesta:
Todo depende de lo que entendamos por la palabra condenación. Aquí no se dice condenados en el día de juicio, ni eternamente condenados. Ni era tal idea de Pablo cuando resistió en la cara a Pedro, «porque era de condenar». El creyente es condenado cuando por su conciencia (foro interno) es redargüido por su mala conducta. Algunos creen que Santiago se refiere aquí a Mat. 7:1: «No juzguéis para que no seáis juzgados», lo cual se refiere a juicio mutuo de contendientes.

La Biblia, revisión 1977, dice «para que no seais juzgados». Sabemos que los creyentes todos tenemos que comparecer ante el tribunal de Cristo para recibir aprobación o censura a nuestros hechos, pero esto no será juicio de condenación, pues Jesús mismo dice: «De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra y cree al que me ha enviado tiene vida eterna, y no vendrá a condenación, sino que ha pasado de la muerte a la vida» (Juan 5:24). Si el Señor halla en nosotros cosas que no son de su voluntad nos lo dirá en casa (*Marcos 9-33), como Pablo lo dijo a Pedro, y ello puede ser motivo por restarnos recompensa, pero no para condenarnos a la perdición eterna.

* Marcos 9:33 – "Y llegó a Capernaum; y cuando estuvo en casa, les preguntó: ¿Qué disputabais entre vosotros en el camino?"

Tomado de Encyclopedia Explicativa de Dificultades Bíblicas –Editorial CLIE- Pág. 192